martes, 7 de agosto de 2012

Sinusitis Aguda

¿Qué es la Sinusitis Aguda?


Es la inflamación de la mucosa de los senos paranasales, pero habitualmente implica siempre un grado de afectación de la mucosa nasal (rinosinusitis).

Se subdivide en aguda, subaguda o crónica según la duración de los síntomas sea inferior a 30 días, entre 30 y 90 días o superior a 3 meses. El papel de la infección bacteriana como causa primaria de sinusitis crónica es controvertido, siendo más consecuencia de factores no infecciosos (alérgicos, irritantes, fibrosis quística...).


La remisión espontánea es tan alta (70%) que aunque el tratamiento con antibióticos parece ser superior a placebo, su significación clínica es dudosa.

Etiología

Las infecciones víricas predisponen al desarrollo de la sinusitis bacteriana (80% de los casos), mientras que el componente alérgico es significativo en el 20% restante. La sinusitis bacteriana casi siempre surge como complicación de una de las anteriores.

La microbiología de la sinusitis bacteriana aguda (SBA) es semejante a la de la otitis media aguda, así como sus resistencias.

Diagnóstico: Anamnesis, exploraciones complementarias y derivación

El diagnóstico de la SA en pediatría es clínico: presencia de síntomas respiratorios altos más persistentes o más severos que los esperables en un catarro no complicado. Existen dos situaciones clínicas que nos hacen sospechar una SA:

1. Síntomas catarrales leves (rinorrea, tos diurna) que no ha empezado a mejorar tras 10 días (criterio de Persistencia): es la presentación más habitual y debe diferenciarse de los catarros encadenados.

2. Concurrencia de fiebre elevada (≥ 39 ºC) y rinorrea mantenidas 3 días (criterio de Gravedad) con afectación del estado general. El dolor de cabeza y facial están presentes sólo en un tercio de los niños y es poco frecuente en los pequeños.

Por tanto, la diferenciación entre rinosinusitis vírica y la sinusitis bacteriana ha de basarse  en la duración, pero no en el aspecto del exudado nasal. La presencia de rinorrea prolongada de más de 10 días permite predecir alteraciones radiológicas asociadas a una infección bacteriana (90% en edades entre 2 y 6 años, y 70% en mayores de 6 años). 

En general el uso de la radiología simple no está indicado en el manejo de sinusitis en Atención Primaria. La presencia de un catarro común sin sinusitis puede provocar  alteraciones radiológicas similares, que permanecen hasta dos semanas después de la mejoría clínica. Además no distingue entre una sinusitis bacteriana, viral, o de otras causas.

Las pruebas de imagen deben reservarse a casos de fracaso terapéutico o empeoramiento de síntomas, y no están recomendadas en menores de 6 años. El tratamiento empírico estaría pues justificado sin realizar ninguna prueba previa. Rx senos paranasales: En general no se recomienda por el desarrollo cronológico de los senos paranasales en el menor, además no ayuda a diferenciar entre procesos virales de los bacterianos. La tomografía axial computarizada es una importante ayuda imagenológica para documentar la existencia del compromiso sinusoidal, y tiene unas indicaciones muy precisas.



Son indicaciones de derivación hospitalaria urgente la afectación severa del estado general (aspecto séptico, cefalea facial intensa), la sospecha de complicaciones (craneales, endocraneales y oculoorbitarias,  salvo la celulitis preseptal que puede tratarse inicialmente en Primaria) o tumor (síntomas unilaterales persistentes como epistaxis, obstrucción y  rinorrea, siendo la deformidad facial un síntoma tardío) y la existencia de un entorno familiar de riesgo que no garantice cuidados generales, cumplimiento terapéutico y vigilancia eficaz. En rinorrea persistente unilateral siempre se descartará la presencia de un cuerpo extraño nasal.

Se derivará a  un especialista en caso de fracaso terapéutico (duración de más de 3 semanas a pesar de tratamiento antibiótico adecuado), recurrencia (3 ó más episodios en un año, con intervalo libre de síntomas de 10 días) o ante la sospecha de anormalidad estructural.

Los objetivos del tratamiento son aliviar los síntomas y reducir el riesgo de complicaciones y sinusitis crónica. Alrededor de dos tercios de los pacientes con SBA mejoran sólo con placebo, sin recibir antibióticos (aunque éstos son superiores a placebo).

La evidencia disponible sobre la eficacia de los antibióticos en la SBA de los niños se deriva de una revisión Cochrane que incluye solo seis ensayos clínicos aleatorizados (ECAs) de poca población. El beneficio es modesto: tratar durante 10 días reduce la probabilidad de que persista la sinusitis a corto-medio plazo, siendo necesario tratar a 8 niños para obtener una curación adicional (NNT 8, IC 95% 5-29). No se han documentado beneficios a más largo plazo. 

Por tanto, el uso de antibióticos inicialmente no está indicado en la mayoría de los casos si no presenta criterios de gravedad o persistencia. Como tratamiento sintomático analgésico y antipirético son efectivos paracetamol e ibuprofeno. Suelen ser necesarios pocos días.

No hay evidencia suficiente para recomendar uno u otro antibiótico; la recomendación se hace según criterios de eficacia en ECAs publicados, efectos adversos, experiencia clínica, patrón de sensibilidad bacteriana local y coste. 

Teniendo en cuenta los microorganismos habituales, la amoxicilina (40–50 mg/Kg/día) es el antibiótico de primera elección. El fracaso terapéutico por resistencia antibiótica se debe en el caso del neumococo (40%) por cepas con susceptibilidad disminuida, mientras que para Haemophilus influenzae (20%) y Moraxella catharralis (80%) son por producción de betalactamasas. Por todo lo cual si no existe mejoria con el tratamiento inicial se utilizará Amoxicilina-clavulánico (80 mg/Kg/día) como segundo nivel de antibioterapia. No obstante, puede ser usado como primera elección en caso de riesgo alto de resistencia (edad menor de 2 años, toma reciente de antibiótico o zonas de alta prevalencia de neumococo resistente).
 
Aunque hay pocos estudios, no se han encontrado diferencias entre el tratamiento antibiótico de corta y larga duración, no han encontrado diferencia entre ellos. La mayoría de ensayos se han realizado con 10 días de duración, y una aceptable opción es completar 7 días tras la mejoría evidente.


Referencia:
- Pascual Perez JM, Callen Blecua M y Grupo de Vías Respiratorias. Guía Rápida del Protocolo de Sinusitis. El Pediatra de Atención Primaria y la Sinusitis. Protocolo del GVR (publicación P-GVR-7) [consultado 12/7/12]. Disponible en: www.aepap.org/gvr/protocolos.htm

Por:
Wilmer Eduardo González Blanco.
7 Agosto 2012